Brasil; 20/agosto/2019.- Tras más de tres horas de negociaciones, el delincuente que este martes mantuvo secuestrado un ómnibus con una veintena de pasajeros en el Puente del Río Niteroi, en Río de Janeiro, murió por el disparo de un francotirador de la policía militar.
Según informó O Globo, sobre las 9 de la mañana hora local, el secuestrador salió del ómnibus apuntando en la cabeza a uno de los rehenes que permanecían en el vehículo, y en ese momento se escuchó una detonación. Instantes después, el secuestrador yacía en el suelo, y los policías celebraban.
Al menos seis de las personas inicialmente retenidas habían sido iberadas tras el inicio de la toma de rehenes, hacia las 5:30 locales.
Sin embargo, el portavoz de la policía militar, coronel Mauro Fliess, dijo a O Globo que permanecían 31 rehenes en el vehículo al momento en que el delincuente fue ejecutado.
Durante más de tres horas el delincuente amenazó a los pasajeros con una pistola y con un bidón con nafta, con el que pretendía incendiar el vehículo.
“Fue necesario disparar” contra el hombre, declaró a la televisión Globo el coronel Mauro Fliess, precisando que 31 personas eran retenidas como rehenes en el bus y no 16 como se había indicado previamente.
(Con información de AFP)